Afterwork (en inglés, ‘después del trabajo’) es una tendencia que ha venido creciendo a nivel mundial y en principales ciudades del mundo. Debido a las exigencias laborales y los ritmos de trabajo, las compañías están tomando conciencia sobre la importancia de generar espacios que fortalezcan los lazos labores de sus colaboradores.
Los Afterwork son espacios o reuniones informales de compañeros de trabajos en sitios cercanos a la oficina, donde generalmente se toman cocteles o cafés. Generalmente son los jefes y las empresas quienes fomentan internamente estos afterworks, dado que representan múltiples beneficios tanto laborales como emocionales.
En primer lugar, potencian la comunicación, generan sentido de pertenencia hacia el grupo, crean fuertes vínculos de amistad, favorecen el clima laboral y la productividad. Por otro lado, proporcionan salud, felicidad, mayor energía, disminuyen el estrés y fortalece las relaciones con la red de contactos (networking).
Estos encuentros se generan en un ambiente diferente y relajante, fuera del horario laboral, en donde empresarios, clientes y colaboradores pueden hablar de manera informal, conocerse y crear oportunidades de negocio.
Los mejores lugares para hacer AfterWork son restaurantes y bares cercanos a las oficinas de trabajo y aunque no hay un día en específico que resulte mejor, lo más recomendado es hacerlo los días jueves o viernes luego de cada jornada laboral.